Delicada y cariñosa. Así soy yo, Sara. Mi rostro y mi mirada angelical ocultan una chica atrevida y aventurera, una joven con mucho estilo que siempre está buscando la forma de pasarlo en grande y con quien es imposible aburrirse. Sentirse bien junto a mí es algo natural. Y es que siempre transmito dulzura y buen karma.